Diego Rivera en Toledo

El mejicano Diego Rivera vino a España por primera vez en 1907, donde permaneció durante dos años, hasta que en 1909 se trasladó a Francia. Al parecer, en ese tiempo hizo alguna excursión puntual a Toledo y en 1910, de viaje a México, volvió a parar en nuestra ciudad. A su vuelta de América se instaló en París, viajando a España ocasionalmente. Viene a Toledo en otoño de 2011 con el fin de estudiar a El Greco,  junto a su compañera, la artista rusa Angeline Beloff. La pintura del cretense le impresiona, aunque inmediatamente se inicia en el cubismo. Regresa en la primavera de 2012, pasando aquí el verano de ese año, y vuelve por última vez en 1913. Durante su estancia en Toledo  vivió en la Calle del Ángel nº 7.

Diego Rivera. Vista de Toledo. 1912. Óleo sobre lienzo 112 x 91 cm.  Fundación Amparo de Espinosa, Puebla, México

Diego Rivera, Viejos a las afueras de Toledo 1912. Colección Dolores Olmedo. Mexico

Diego Rivera. En la fuente de Toledo,  1913. Óleo sobre lienzo. Museo Dolores Olmedo Patriño, Xichimilco



Central Hidroeléctrica de Azumel

A finales del siglo XVIII empiezó a construirse la Real Fábrica de Espadas de Toledo, próxima al río Tajo para aprovechar su energía hidráulica transformada en trabajo mecánico. Entre finales del siglo XIX y principios del XX las instalaciones se ampliaron notablemente creándose una demanda energética importante, por lo que se construyen varias centrales hidroeléctricas: del Ángel, de la Isla, Santa Ana o Azumel, en algunos casos edificadas en los lugares donde previamente existieron molinos antiguos, como es el caso del Ángel o de Azumel.

Central eléctrica de Azumel. Ficha del Catálogo del Plan de Ordenación Municipal

Fotos: isgsago